Desde el principio los tamaimos hemos querido reflexionar sobre la canariedad y lo canario sin complejos, de manera crítica y aportando nuestro esfuerzo a la recuperación de la dignidad y la riqueza de una cultura, la nuestra. Lo hemos hecho siempre con la mano tendida, tratando de sumar; por eso nos alegra especialmente encontrar a otros que nos acompañan en este empeño por conformar una cosmovisión canaria autocentrada, con los pies firmes en las islas y la mirada en el mundo.
Viene al caso todo esto porque Alternativa Nacionalista Canaria (ANC) se hizo eco recientemente de la problemática en torno al gofio que venimos denunciando en Tamaimos.com. Lo que en principio es motivo de alegría, sin embargo, esta vez no lo es tanto por un par de errores de bulto que cometen desde ANC: primero, apropiarse de dos textos ajenos y aprovecharlos para una nota de prensa sin pedir permiso a sus autores y sin mencionar la fuente. Segundo, forzar más allá de lo razonable la interpretación de nuestros artículos, claramente irónicos (ni el gofio es gallego, ni lo conoce prácticamente nadie en Galicia). El texto publicado en Tamaimos no corresponde a campaña promocional ninguna, ni se presenta como tal en ningún sitio. Es una denuncia, con mucha retranca, eso sí, a la falta de visión empresarial canaria, al sempiterno complejo que cae sobre todo lo nuestro, hasta el punto de que vienen otros a hacer negocio con productos canarios emblemáticos cuyo valor los canarios no somos capaces de ver.
Todo se podía haber resuelto fácilmente con una simple consulta, pidiendo permiso para usar los textos y citando su procedencia, más todavía cuando el objetivo que unos y otros perseguimos aquí es el mismo. Quienes queremos contribuir a conformar un pensamiento crítico canario tenemos que ser especialmente rigurosos en nuestra argumentación y exquisitos en las formas. Lo contrario es seguir fomentando la dispersión, que conduce a la nada.