
Aniaga Afonso
En este número traemos la voz de Luz Mary Duque, docente de Lanzarote y activista por la canariedad dentro y fuera del ámbito educativo formal. En esta entrevista se desgranan algunos de los interrogantes para una identidad cultural, amenazada en muchos aspectos y que no acaba de tener en el sistema educativo a un aliado. Sin embargo, para nuestra entrevistada, hay razones para la esperanza si una nueva hornada de docentes canarios y canarias recoge el testigo de tantos y sabe adaptarse a los desafíos de los nuevos tiempos.
Revista Digital Tamaimos: Preséntate
Luz Mary Duque: Mi nombre es Luz Mª Duque Dorta. Soy maestra de profesión, actualmente asesora del profesorado y, entre las áreas, proyectos y programas que llevo, soy la asesora de referencia para los centros educativos de Lanzarote del área de Patrimonio Natural, Social y Cultural Canario. Me dedico, además, a la promoción de la cultura por pasión. Soy miembro de tres asociaciones culturales y presidenta de una de ellas.
RDT: ¿Con qué faceta de tu vida te sientes más identificada y por qué?
LMD: Me siento totalmente identificada con la enseñanza, con la transmisión de conocimientos, de experiencias, de proyectos de aprendizaje, de valores, el desarrollo de la conciencia crítica, el desarrollo de las competencias clave… Me apasiona el compromiso de estar con el alumnado y acompañarlos a descubrir y a sentirse parte del territorio, a la vez que cumplimos con los objetivos del currículo. En el proceso de enseñanza y aprendizaje se produce una conexión especial que permite el desarrollo integral del alumnado y el mío propio. Nos enriquecemos mutuamente de todas las experiencias y cada día aprendo de ellos y de ellas. Emocionalmente se crea un vínculo para toda la vida. Tengo un grato recuerdo de cada uno de los grupos de alumnos y alumnas que han compartido conmigo su etapa escolar, tanto de infantil y primaria como de secundaria y también alumnado adulto. Otra faceta con la que también me siento plenamente identificada es con la transmisión y puesta en valor de la cultura y del patrimonio, la cual está implícita en mi labor docente.
RDT: En tu larga labor docente has dado prevalencia a los contenidos canarios, especialmente en artes plásticas, frente a un currículum oficial que cada vez más los arrincona y homogeniza, ¿qué consejos darías a la nueva hornada de maestros y profesores canarios?
LMD: Durante mi labor docente siempre he dado prioridad a los contenidos canarios, abordándolos de manera interdisciplinar y con un enfoque patrimonial. La identidad, la vinculación con el entorno, el sentimiento de pertenencia, el arraigo, son fundamentales para atrapar la atención y motivar desde la puesta en valor y desde el amor al territorio.
Como dices, también he abordado las artes plásticas y he trabajado con proyectos que desarrollan y amplían conocimientos sobre nuestra realidad, nuestros orígenes y nuestras particularidades, sobre todo con la obra indigenista y obra de artistas canarios. Pero recalco que también he trabajado la figura y obra de otros artistas de diferentes procedencias, porque la diversidad es enriquecimiento y aprendizaje. Es necesario tener en cuenta que cualquier propuesta educativa, cualquier situación de aprendizaje, requiere de un enfoque inclusivo y transversal. El arte y nuestro patrimonio se erigen en el eje fundamental a partir del cual conectamos todas las áreas.
La nueva hornada de docentes canarios y también los que nos llegan de fuera han de replantearse el modo de transmisión de los conocimientos que nos conectan con nuestra identidad; es un reto resaltar la puesta en valor del patrimonio en la comunidad educativa. Desgraciadamente la cultura digital nos puede alejar del contexto más cercano y acercarnos al desconocimiento patrimonial. Para que esto no suceda, igual la fórmula podría ser combinar ambos recursos, tecnología y didáctica del patrimonio, aprovechando el potencial formativo del mundo digital.
Los docentes tienen que conocer el patrimonio y atender a lo contemplado en los currículos. El enfoque pedagógico debe ofrecer nuevas experiencias que enriquezcan los procesos de conocimiento en entornos de aprendizaje motivadores. Les diría que la sensibilización hacia nuestro patrimonio y el uso del mismo en el contexto educativo les va a enriquecer y podrán conectar más con el alumnado, pero primero hay que conocerlo para aprender a amarlo. Afortunadamente contamos con muchos docentes en Canarias que realizan una labor muy valiosa en cuanto al patrimonio y suelen ser los impulsores de dinámicas y experiencias en los centros. Serán el mejor referente para las nuevas hornadas.
RDT: Relacionado con la pregunta anterior, ¿en qué momento crees que se encuentra la educación en Canarias? ¿Qué retos tiene por delante? ¿Qué se ha conseguido hasta ahora con respecto a la preservación y difusión de nuestra identidad como pueblo?
LMD: La educación en Canarias se encuentra en un momento de análisis y reflexión. Según algunos estudios, Canarias muestra un retraso en materia educativa en comparación a otras comunidades y esto es para reflexionar. Según el último informe PISA, Canarias es una de las comunidades con peor rendimiento académico. Es necesario hacer una valoración y abordar las dificultades y necesidades de la población escolar. Sería conveniente realizar un esfuerzo conjunto desde los ámbitos educativo, social, político y económico. Se deben impulsar iniciativas que mejoren el éxito académico. Sin duda, es un tema complejo y me consta que se ponen en marcha mecanismos en esta línea.
Con respecto a los retos y, al margen de la necesidad de una mejora académica, social y emocional del alumnado, el principal reto viene pisando fuerte: controlar la tecnología. La tecnología puede ser una gran aliada; se constituye como un elemento motivador para el aprendizaje y como un recurso educativo de gran potencial, pero sabiéndolo utilizar. Cada vez observamos cómo los y las más jóvenes pasan gran parte de su día a día conectados a un dispositivo, mermando la interacción con sus iguales de manera presencial, recurriendo cada vez más a la IA, dejando en algunos casos hasta de “pensar”.
La preservación y la difusión de nuestra identidad como pueblo es una asignatura que necesita mejorar. La formación en esta materia es necesaria y fundamental. Desde mi puesto como asesora organizo cada año diferentes formaciones para el profesorado relacionadas con el patrimonio. Aunque la participación es buena, siempre quedan plazas vacantes. Gran parte del profesorado no se forma en este ámbito y es necesario para poder abordarlo desde el currículo. Obviamente, muchos docentes poseen conocimientos adecuados sobre el patrimonio y me consta que se llevan a cabo experiencias magníficas y enriquecedoras, pero la realidad es que un importante número de docentes no trabaja el patrimonio en el aula. Estas formaciones ayudan a los docentes a tener otros puntos de vista, compartir buenas prácticas docentes, conocer aspectos del patrimonio cercano que muchas veces no sabemos que lo tenemos tan cerca… La formación es un requisito primordial para avanzar en este camino. Se ha conseguido que cada vez más el profesorado tome conciencia de esta necesidad y se motive, aunque va lento. Otro aspecto a señalar es que la diversidad y globalización en la que nos encontramos puede ser un handicap si no se lleva a cabo adecuadamente el trabajo sobre identidad. Tengo conocimiento de familias no canarias que se oponen al aprendizaje de contenidos canarios.
No todo puede depender de la voluntariedad del profesorado para lograr la difusión de nuestra identidad como pueblo. Habría que destacar, además, la ingente labor de muchos docentes que día a día trabajan el patrimonio en sus aulas.
RDT: Recientemente, Tamaimos sacó un documental sobre el español de Canarias, del que eres una firme defensora, ¿lo has podido ver? En caso afirmativo ¿qué opinión te merece? ¿Te parece que el dialecto canario está lo suficientemente protegido?
LMD: Este tema es una de mis grandes pasiones y lucha. Por supuesto que lo vi. Me parece muy buen documental y sería necesario que todo el personal docente lo viera. Es muy instructivo, muy claro, abordado desde distintas ópticas y muy fiel a la realidad, a la par que reflexivo y crítico. Es mi lucha porque no entiendo la posición de algunos docentes que pronuncian la letra zeta en un dictado, por ejemplo (siempre pongo este ejemplo y además sale en el documental). Yo aprendí en la escuela con docentes canarios y no tuve nunca ninguna dificultad de expresión escrita u oral.
Recientemente organicé una actividad formativa “Celebrando la diversidad lingüística: valoración y enseñanza del español de Canarias en su contexto patrimonial”, a la cual asistieron unas 100 personas. Con esta formación lo que pretendía era que el profesorado tomara conciencia de nuestro patrimonio lingüístico y se mentalizara de que el español de Canarias, no es un español mal hablado. No solo se trataron aspectos estrictamente didácticos y de conocimiento sobre la diversidad lingüística, sino que el profesorado logró ver en este patrimonio un recurso didáctico necesario. Al finalizar la formación un profe de fuera de las islas se acercó para agradecer dicha formación. Sus palabras fueron “Ojalá hubiera sabido esto antes, yo pensaba que ustedes hablaban mal”. Para mí esto fue un regalo de esta persona, el mejor premio.
Nuestro dialecto no está suficientemente protegido. Considero que es necesario protegerlo, darle mayor relevancia de la que tiene y en el ámbito docente generar sinergias que eviten los perjuicios que causa la inseguridad comunicativa de gran parte del alumnado y del profesorado que se esfuerzan en hablar con otra modalidad dialectal. Además, los libros de texto carecen de nuestra variante lingüística y esto es algo fundamental para comenzar con esta protección y puesta en valor.
RDT: Eres una destacada activista cultural en Lanzarote, ¿de qué manera te influyó la figura de César Manrique?
Desde que recuerdo César Manrique estuvo presente en mi vida, era muy joven pero sabía de sus manifestaciones activistas y de su pasión por difundir y mejorar la imagen de nuestro territorio. Sus obras captaron mi atención desde temprana edad. Me apasiona su idea de fusión Hombre y Naturaleza en su obra. César Manrique fue el primer artista que trabajé de manera interdisciplinar en el aula y a partir de su obra comencé mi labor docente basada en proyectos. Con un proyecto educativo interdisciplinar gané un premio a la mejor propuesta didáctica, organizado por la Fundación César Manrique.
Su obra nos permite visibilizar nuestro entorno de manera estética, conocer las particularidades de un territorio con mucho valor intrínseco y desarrollar la creatividad poniendo en valor nuestro medio ambiente y nuestro territorio. Donde el mundo entero vio una isla quemada, él vio belleza y supo transmitirla al resto del mundo. A partir de su obra y del arte en general, con diferentes actividades, se fomenta la actitud crítica y la reflexión.
RDT: En el número anterior entrevistamos a Alicia Borges, una ilustradora de Tenerife, que señaló la ausencia de artistas canarias de referencia en los contenidos de la Universidad, desgraciadamente, esto no es nada nuevo, pero ¿cómo has conseguido integrar en tu tarea docente la visibilidad de las mujeres y el contenido canario?
LMD: Como dice Alicia, es cierto que la visibilidad de la figura de la mujer en el arte no es muy óptima y es otra de las asignaturas pendientes. La forma en que he logrado integrarlo en la actividad docente de enseñanza y aprendizaje es partiendo de lo más cercano, de aquellas mujeres relevantes que han dejado alguna huella, como es el caso de las artistas que son capaces de hacer sombreras o rosetas, o aquellas que aprendieron a ser parteras o practicantes (las que ponían las inyecciones), por ejemplo. Pero también desarrollo actividades partiendo de mujeres artistas conocidas, como por ejemplo Jane Millares, entre otras. Aclaro que no solo lo he hecho con mujeres artistas del contexto cercano; durante el confinamiento desarrollé un proyecto llamado «Mujeres relevantes» (con el cual logré un premio), en el que abordé figuras de mujeres activistas, escritoras, presidentas, faraonas…
RDT: Gracias a la iniciativa de la Asociación Pueblo Maho, a la que perteneces y de la que fuiste secretaria, en la isla de Lanzarote se están desarrollando muchas actividades de revalorización y divulgación de la cultura canaria, desde el arte a la arqueología, ¿crees que este modelo se podría llevar a otra islas? ¿por qué crees que está funcionando tan bien o cómo lo valorarías tú?
LMD: Efectivamente, desde la asociación tratamos de abarcar todos los aspectos relacionados con el patrimonio, en todas sus acepciones: patrimonio arqueológico, artístico, lingüístico, arquitectónico… desarrollando acciones de divulgación que pongan en valor la cultura canaria. Nuestro propósito es cubrir la demanda y las necesidades que observamos en la isla, desde el ámbito educativo al general de la sociedad.
Considero que ha funcionado bien porque llegamos a diferentes sectores de la población. Planificamos y desarrollamos actividades no solo para el público en general sino también para los docentes y la población escolar. La subvención recibida desde la D. G. de Patrimonio Cultural nos permite desarrollar todas estas actividades. Ofrecemos actividades en la naturaleza (para todas las edades), actividades en los centros educativos, presentaciones de libros, talleres de artesanía, charlas, senderismo interpretado, etc.; también con algunas colaboraciones de ayuntamientos planificamos algunas acciones culturales y educativas en los diferentes municipios.
En colaboración con el CEP Lanzarote organizo cursos de formación y actividades puntuales relacionadas con el patrimonio. Valoro muy positivamente estas intervenciones porque hemos logrado alcanzar a un público considerable y el feed-back recibido es muy bueno. De hecho, son muchos los centros educativos que se dirigen a nosotros solicitándonos alguna actividad. Procuramos que las actividades se desarrollen a lo largo del año y no únicamente en la semana del Día de Canarias. Canarias es todo el año.