Enrique Bethencourt es periodista y pedagogo. También es autor del libro «El fútbol canario. Identidad, Valerón y otros desmarques» de Ediciones Tamaimos. Es uno de los firmantes a título individual de la campaña «Canarias, con voz y voto» de la Fundación Canaria Tamaimos.
¿Es realmente imparable el cambio de modelo territorial en el Estado español?
Considero que es recomendable, pero no imparable. Lo que estamos viendo es un crecimiento del conservadurismo neocentralizador, el del PP y el más novedoso de un Ciudadanos en alza, con un proyecto y propuestas aún más radicales y peligrosas (entre otras cosas porque no tiene poder autonómico). Nunca creí en los procesos constituyentes que algunos auguraban inmediatos. Mucho me temo que, hoy por hoy, lo que puede haber es un intento de involución. Malos tiempos para la lírica.
¿Cómo valora, más de 25 años después de su aprobación, el actual Estatuto de Autonomía de Canarias?
35 años después lo valoró positivamente. Ha posibilitado que desde aquí podamos dirigir los servicios públicos y muchas de las políticas esenciales. Los que conocimos la Canarias de los setenta y ochenta, sabemos las transformaciones que se han producido. Otra cosa bien distinta es que se haya gobernado bien, en función de los intereses generales, que no se haya priorizado suficientemente la educación o la sanidad, que muchos gobernantes desprecian el territorio y el medio ambiente, que sigue habiendo un sistema electoral injusto, desequilibrado y poco democrático.
¿Hoy en día es suficiente este Estatuto?
Estoy muy atento a su reforma que supone un paso que se debió dar en 2007 y que frustró CC por su miedo a que se modificara el sistema electoral. Y, como en la primera pregunta, temo los intentos de recortes de PP y Cs al texto. Para ir más allá hace falta una masa crítica que hoy no existe. Ni siquiera esta reforma estatutaria obedece a una presión social sino a un voluntarismo de algunas formaciones políticas.
¿Qué nuevas competencias debiera incluir el nuevo Estatuto de Autonomía de Canarias?
El tema de las aguas canarias me parece clave; hoy entre las islas hay aguas internacionales. También los asuntos vinculados con aeropuertos y trafico aéreo. O incluir una renta básica canaria.
A su juicio, ¿qué legitimidad aportaría que el nuevo modelo para Canarias fuera votado?
Debió hacerse en el primer Estatuto, pero los poderes fácticos impusieron el 143 para que no fuera así. Hubiese aportado mayor legitimidad si hubiese sido debatido, lo que no sucedió. Y claro que preferiría que fuera ratificada en referéndum esta y futuras reformas.
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