1917: Atraca en el Puerto de La Estaca, El Hierro, un submarino alemán, violando así el estatus de neutralidad de Canarias y España. El alcalde de Valverde exige hablar con el comandante y es invitado a subir a la nave, que zarpa con el alcalde dentro. Una semana más tarde, cuando ya se daba al regidor por perdido, regresa el submarino y desembarca al alcalde, que se despide de la tripulación con grandes gestos de amistad.