Hace unos meses, el Concejal de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, Sergio Millares, afirmó que «las calles de Las Palmas de Gran Canaria deben llevar nombres de personas ejemplares». Millares se refería a las calles con denominaciones franquistas, pero nosotros quisimos ir más allá y propusimos incluir a personas y hechos relacionados con matanzas de cualquier tipo, sobre todo en un período trascendental de nuestra historia como es la Conquista. Nombres como Pedro de Vera, Juan Rejón, Pedro de Algaba o Alonso Jaime de Sotomayor, deberían engrosar esa lista de personajes indeseables en nuestro callejero. Así lo propuso Iván Suomi en su artículo en referencia a este tema.
Una vez pasado el tiempo, y de manera totalmente autónoma, un grupo de vecinos de La Isleta solicita el cambio de la calle Juan Rejón por el primigenio de La Carretera. Tras la propuesta se decidió realizar un referéndum municipal que tendrá lugar el próximo martes 17 de noviembre, entre las 16:30 y 22:00 en el Centro Cultural Pepe Dámaso del populoso barrio. Algunos sectores ya han iniciado desde hace días la campaña para mantener el nombre del conquistador, obviando totalmente las tropelías del proceso de supuesta fundación y esgrimiendo razones de índole burocrático.
La Fundación Canaria Tamaimos no se quiso mostrar impasible. Desde el momento en que se abrió el debate sobre el nombre de las calles, allá por el mes de septiembre, quiso participar en la discusión, añadiendo en el debate de la memoria histórica el proceso de conquista y colonización de las islas. Acordamos una reunión con el susodicho Concejal de Participación Ciudadana que mantuvimos ayer mismo. En ella trasladamos a Sergio Millares nuestra preocupación por la permanencia de conquistadores, que para nada son «personas ejemplares», en el callejero de la ciudad. Millares pidió a la Fundación que tomara una serie de iniciativas para avanzar en la disposición, como una lista de calles a eliminar. Asimismo, ambas partes se emplazaron para una nueva reunión, en la que ya se concrete de manera efectiva todas las intenciones. Además, la Fundación tiene la voluntad de debatir la iniciativa con otras entidades, organizaciones y colectivos.
