Lo ocurrido en La Fortaleza de Santa Lucía de Tirajana hace uno días fue más allá de una actuación musical. Y eso creo que lo sentimos todos los que tuvimos el privilegio de asistir al concierto que bajo la denominación “Sonidos de identidad” nos brindó el histórico grupo canario Non Trubada.
El contexto parecía insuperable. En plena celebración del Bicentenario del municipio de Santa Lucía de Tirajana y en un marco incomparable como el de La Fortaleza que durante tanto tiempo se identificó con la de Ansite. Este hecho no resta valor al enclave ya que hablamos de uno de los conjuntos arqueológicos más importantes del país en una comarca que además fue escenario del final de la conquista de la isla… Un entorno natural espectacular que envuelto en un cielo estrellado fue cómplice directo del evento aportando una sorprendente acústica natural. El juego de luces y por supuesto los acordes del grupo santaluceño hicieron que el más de un millar de asistentes que abarrotaron la explanada de La Fortaleza vivieran una noche mágica.
Non Trubada ofreció un repertorio de 23 canciones incluyendo temas que ya son clásicos de la música canaria como Mujer de las Tirajanas, Isa, Agüíta de Amor, Veneguera o Ansite. Sonidos que expresan más que palabras, letras fuertemente impregnadas de amor y ternura por un país. Sus palabras mostraron que el reconocimiento internacional no es óbice para manifestar un compromiso claro con la identidad de esta pequeña gran nación canaria. Y así fue, había que estar allí para experimentar la emoción, recuerdos y orgullo que se respiraba. Sin lugar a dudas un concierto histórico que nos muestra una vez más que ‘lo nuestro’ si se hace con calidad y respeto engancha al gran público.
«Ha sido un gran orgullo para nuestro grupo, porque la música y la palabra encuentran en este lugar el espacio fértil donde atisbar el ansiado futuro que cobra sentido al pie de nuestra historia». Así lo expresaba a la prensa el tirajanero Luis López, uno de los integrantes del conjunto al concluir la actuación.
Non Trubada
Con más de 20 años de andadura y su original fusión de sonidos celtas, del África negra y de nuestra música tradicional canaria, este grupo formado por músicos de Santa Lucía y Teror se ha ganado un prestigio no sólo a nivel internacional sino sobre todo en nuestro pequeño país. Un grupo de ideas frescas, con marcado sonido propio pero que sobre todo tocan con amor, hecho que se palpa en cada instante. Un grupo con la bandera de la solidaridad, con las personas, los pueblos y sin complejos con Canarias.
Reconozco mi admiración por Non Trubada. Tienen el mérito de haber logrado ser profetas en su tierra, algo que ustedes me reconocerán que no es baladí en estos terruños a la deriva. También creo justa la mención al Ayuntamiento de Santa Lucía por esta magnífica iniciativa que no sólo ha contribuido con la revalorización de este espacio al prestigio del municipio, sino de todo un pueblo. Y es que esa noche en Tirajana nos hizo soñar en San Borondón, esa ínsula aún no conquistada, una fortaleza canaria non trubada.