Era una noche de Navidad. En Agüimes se encuentran los fundadores de Tamaimos, Tenesor Rodríguez, Iván Vega y Josemi Martín, con Juan García Luján. El encuentro no es casual, había un encargo para el periodista, en aquel entonces en paro. Así lo cuentan, grosso modo, en el prólogo del libro «De un tiempo, de un país». La obra resultante se presentó anoche en el mismo lugar donde nació. Acompañaron al periodista los entrevistados Roque Calero (ingeniero) y Antonio Morales (Alcalde de Agüimes y candidato al Cabildo de Gran Canaria), y el periodista José Antonio Neketan, que presentó el acto.
José Antonio Neketan abrió las intervenciones recordando su época estudiantil en Bilbao, donde coincidió con Juan García Luján. Allí muchos canarios cambiaron su acento por complejo, mientras otros se presentaban por barrios, mostrando el orgullo de su origen. Destacó el esfuerzo del autor para realizar el libro, que no se conformó con completar su jornada en los medios. Un libro que Neketan leía mientras asentía con la cabeza, ante las disertaciones de los entrevistados. «No somos tan pequeños como nos quieren hacer ver», expuso, a la vez que alabó el trabajo de la Fundación Tamaimos.
Juan García Luján aludió al origen de la idea de elaborar las doce entrevistas que aparecen en el libro. Todo ello ocurrió en Agüimes mientras estaba en situación de desempleo. Una época en la que vivió algunas anécdotas, como la propuesta de colaboración, sin sueldo de por medio, que le hizo un sindicato en medio de una manifestación contra la Reforma Laboral del Partido Popular. Todo una paradoja. Luján señaló que en el libro hay reflexiones de expertos en su materia, no de los todólogos que suelen salir en los medios cada día. Además las doce personas escogidas tienen un discurso específico para Canarias.
En tercer lugar habló Roque Calero, que comenzó acordándose de la labor de la Fundación Tamaimos, construyendo Canarias desde la reflexión crítica. En cuanto a la realidad actual, ve la necesidad de buscar un futuro común y sostenible para todo el pueblo. «Pudiendo estar mejor, por qué estamos así, es la pregunta que deberíamos hacernos». Para Calero tenemos en nuestras manos todas las herramientas para labrar ese futuro, pero quiso resaltar que tiene que ser desde abajo. En cuanto a nuestra situación, señaló que los «grandes cambios surgen desde abajo y en lugares periféricos. Canarias es peculiar y está en el centro, entre continentes, no somos periféricos como nos dicen. ¿Puede ser Canarias el motor de ese cambio global?». Expuso el ejemplo de Agüimes y la Mancomunidad del Sureste, reconocida mundialmente por ser ejemplo de sostenibilidad. Sobre la crisis económica, considera que es salvable. Lo que está fallando, en palabras del ingeniero, es la atribución de recursos y el modelo de desarrollo. Para forzar el cambio de dinámica cree que es muy importante el papel de la sociedad civil.
Arrancó Antonio Morales con un reconocimiento al compromiso de la Fundación Tamaimos. Habló de Roque Aguayro, formación que nace en el año 1979, con la ilusión de tomar el poder, una ilusión que hecha en falta en los tiempos actuales. «Con 17 o 18 años ya pensaba en cambiar las cosas desde la política» afirmó. Morales señala que la crisis ha infundido miedo a la gente, ya que la mayoría de la población está en situación de precariedad o en peligro de estarlo. «Esta depresión social genera un pensamiento que aleja de la construcción de lo colectivo», resaltó el Alcalde de Agüimes.
En el turno de preguntas, Antonio Morales se refirió al nacimiento de la formación Unidos por Gran Canaria, que rivalizará con su programa para gobernar en el Cabildo Insular de Gran Canaria. Morales subraya que la política que siguen es «populista, solo para arrastrar a las masas». En cuanto a la defensa de la isla de Gran Canaria y la presunción de perjuicio por parte del Gobierno de Canarias, cree que «se ha callado los recortes del Estado porque es del PP». También trazó algunas líneas de su programa para Gran Canaria, una defensa de la isla que pretende «unirse a todas las islas y no separarse». Luchar por los más desfavorecidos con una marcada política social, crear consorcios insulares para que las energías renovables sean públicas, pelear por la soberanía alimentaria y transparencia en la gestión, con una notable participación ciudadana, son algunas de las ideas que Antonio Morales prevé llevar a cabo en la institución insular. Concluyó que es necesario «romper la alianza entre el poder económico y político».
Roque Calero, también en el turno de preguntas, destacó la capacidad de supervivencia de la sociedad indígena, que guardaba el grano para los malos tiempos. Una planificación que echa en falta hoy en día. Volvió a hacer hincapié en que no hay que esperar a que los que dominan protagonicen el cambio, sino la sociedad civil. «Hay gente de afuera que mira para nosotros y se fija en lo que hacemos», añadió en referencia al proyecto de sostenibilidad de los municipios del sureste.
Esta fue la quinta presentación del libro «De un tiempo, de un país», la que trasladó en el tiempo una idea surgida en un bar a una realidad, con la presencia de Roque Calero y Antonio Morales, dos nombres que salieron en aquella mesa. Cada uno de los actos públicos para presentar la obra se convierte en un debate profundo sobre Canarias, su presente y futuro. Todavía aguardan nuevos lugares para conocer más de cerca el libro.