La Palma es una isla que está en Europa, como todos sabemos, y por tanto es normalísimo que un periodista del rotativo independentista El Día se asombre de que dicha isla represente a África en un campeonato internacional de carreras de montaña por los seis continentes. Lo lógico y normal sería que La Palma representara a su continente natural, que es Europa, como testimonio de la belleza y aptitud para la práctica del deporte que encarnan territorios geográficamente hermanos como pueden ser el Tirol suizo, los Alpes franceses, la Selva Negra o los Picos de Europa, mismamente. El hecho de que La Palma, con la carrera llamada La Cabra Trail, represente a África no es sino un dislate geográfico, porque, ¿a quién en su sano juicio le puede parecer que haya algún tipo de relación entre las montañas de La Palma y, por ejemplo, el Atlas marroquí, con sus dragos y esos amazigh comiendo gofio? Atento estuvo el Concejal de Deportes del municipio de Puntallana, Víctor Guerra, (PSOE), al aclarar que “seguramente la organización de este evento, de reciente creación, “no ha podido organizar o encontrar otra carrera en África y por proximidad ha optado por la que tiene lugar en nuestro municipio». ¡Qué elegancia! ¡Cómo corrige a esos incultos señores que sitúan la isla de La Palma en África sin hacer sangre! ¡Con fair play y savoir faire, como dicen en Europa! Y continúa: “»para nosotros lo importante es que se conozca la prueba y que venga gente de diferentes países a correr la Cabra Trail», sin que tenga mayor importancia «al continente que tengamos que representar». Eso sí que es una salida honrosa: a nosotros mientras vengan a dejarse las perras, nos da igual dónde nos pongan. Pues nada. A esperar a ver si el año que viene nos ponen en América y se nos llena de yankees la isla con la cartera llena de dólares. Aunque algo me dice que a más de uno no le molestaría tanto que nos pusieran en América como parece molestarle el que vayamos a representar a África. ¿Por qué será?
