La Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Gobierno Canario pierde un millón de euros por su mala gestión administrativa.
Se trata de un monto que el Gobierno del Estado había adelantado a la Consejería para aumentar los fondos bibliográficos de las bibliotecas canarias, que no están precisamente sobradas de recursos. Las autoridades isleñas, sin embargo, no han sido capaces de justificar la ejecución de los fondos en tiempo y forma, y por lo tanto el Estado reclama que se le devuelva el dinero.
Así nos lo contaba de primera mano Diodoro Santana, presidente de la Asociación Profesional de Bibliotecarios de Gran Canaria, en una entrevista que podrán escuchar íntegra a partir de este domingo por la noche en nuestro podcast semanal.
Parece que al gobierno de Coalición Canaria no le parece mal que nos quiten una inversión de un millón de euros del Estado, un millón destinado a la promoción de la lectura, de la formación y de la labor social que desempeñan las bibliotecas, máxime en los tiempos de crisis y desempleo galopante que vivimos. Ese dinero lo aprovecharían de forma directísima los ciudadanos. Claro, no iba para grandes proyectos de infraestructura, por otro lado.
Canarias, una tierra única, dicen.