Hoy estaba previsto publicar una entrada acerca del asunto del abandono escolar. Sin embargo, la realidad manda y toca aplazar dicha entrada para dar paso a un tema bastante más grave. Los bombardeos del ejército israelí sobre Gaza y su población civil, en una pretendida campaña bélica del ejército israelí contra los miembros e infraestructuras de Hamás constituyen una acción vergonzosa más en la ya larga historia de la ocupación de Palestina. A este oprobio hay que unir el silencio cómplice de la comunidad internacional, que mayoritariamente calla ante las muertes de la población civil, temerosa de incomodar a Israel o a su guardián protector, los Estados Unidos. Poco puede uno hacer desde esta bitácora más allá de dejar constancia de la indignación y repulsa moral que me producen estas viles acciones y manifestar la solidaridad con los palestinos, quienes hoy sufren la sinrazón de ese crimen organizado que normalmente llamamos guerra.