
En declaraciones en exclusiva a Batata News, Manolo González, líder de la formación musical Mestisay y alma mater del proyecto «En busca de Valentina», declaró: «siempre he sido un descreído aunque es cierto que en algún momento de mi juventud probé el espiritismo como vía para entrar en contacto con Néstor Álamo, sin embargo, lo que sucedió la otra noche, está haciendo replantearme muchas ideas acerca de la vida, la muerte, la canariedad,…»
En concreto, González se refiere a una supuesta aparición del espíritu de Valentina la de Sabinosa que habría tenido lugar en su domicilio el pasado 22 de marzo a altas horas de la madrugada. En palabras del músico grancanario, «venía yo rumiando mis asuntos -precisamente la posibilidad de hacer una ópera rock fusionando textos de Palmera y Los Huaracheros- cuando llegué a casa y tras un rato de «En clave de Ja» me fui a la cama. Al rato siento que me tocan por los pies, algo así como una fuerza telúrica mientras a lo lejos se oía un pito herreño tocando la juyona. Pensé que me había dejado alguna ventana abierta y me levanté a cerrarla, cuando de repente vi a Valentina la de Sabinosa al fondo del pasillo, con su traje herreño y su tambor».
El relato prosigue: «Yo, inmediatamente, caí de rodillas y le dije
«¿Qué me quieres, Señora? Aquí estoy postrado a tus pies». Pasó un lapso de tiempo indeterminado hasta que me habló y me dijo lo siguiente:
«Manolo, me tienes vuelta loca la cabeza con tanto concierto… Ya no sé ni dónde meterme… Yo te ordeno tres cosas»
«Tú ordena que yo sabré cumplir tus deseos, ¡oh, Valentina!»
«Lo primero es que tú abandones la vida que llevas y te dediques a cantar por los caminos mis loas a la Virgen de los Reyes»
«Así lo haré», respondí yo.
«Lo segundo es que dejes de usar esas camisas que te pones últimamente»
«Así lo haré», respondí yo.
«Por último, quiero que tú, Olga Cerpa y Luis Morera saquen un disco con versiones tecno-dance de los mayores éxitos de Mestisay y Taburiente.»
«Y en ésas estoy», añade González. «Ando preparando un espectáculo tecno-dance que estrenaremos en el Nooctua de La Laguna con nuestros auténticos bombazos a ritmo de máquina total. La verdad es que poco a poco ya se me va pasando la impresión de la aparición ésta y vuelvo a dormir solo, sin las marionetas de Chopito y Chaporro que conservo, pero ahora lo primero es lo primero y lo que toca es cumplir con este encargo divino de Valentina, que me ha escogido para cumplir sus designios en la Tierra, por lo visto. Ahora, las camisas no las cambio ni de coña».